Conmebol y su presidente, Alejandro Domínguez, son un desastre, vea cómo le dieron la espalda a Sudamérica

El presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez recibió críticas por no haber asistido a la despedida del jugador uruguayo Juan Izquierdo, al encontrarse en Mónaco para el sorteo de la renovada Champions League, generando malestar entre seguidores. Miles de hinchas de Nacional se acercaron a las afueras del estadio Gran Parque Central para homenajear al jugador en una sentida despedida a la que asistieron representantes del propio Sao Paulo.

De igual manera, también asistió una comitiva del clásico rival, Peñarol, liderada por su entrenador Diego Aguirre, gesto que trascendió las diferencias deportivas para destacar el respeto y cariño que Izquierdo había ganado en el ámbito futbolístico. La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) emitió un comunicado oficial expresando su más profundo pesar, lamentando sinceramente el fallecimiento del deportista y transmitiendo sus condolencias a familiares y amigos.

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Alejandro Domínguez prefirió irse para Europa

Sin embargo, ningún representante de la entidad y muchos menos su presidente fueron capaces de hacer presencia en este acto tan importante. En su lugar, Domínguez prefirió presenciar el sorteo de la Uefa Champions League, algo que no le compete en lo absoluto a él. Por tal motivo, en las redes sociales miles de aficionados del fútbol sudamericano lo están criticando a todo lo que da.

El mundo del fútbol lamenta profundamente la partida inesperada de Juan Manuel Izquierdo, destacado defensor uruguayo que falleció a los 27 años a causa de una arritmia cardiaca luego de derrumbarse mientras disputaba un partido por la Copa Libertadores entre Nacional de Montevideo y São Paulo en el estadio Morumbí.

La Conmebol se pronunció, pero no hizo presencia

El encuentro culminó con el triunfo del equipo paulista por 2-0, decretando así la eliminación del conjunto charrúa del certamen. Asimismo, la Conmebol decretó tres días de luto en su honor y ordenó un minuto de silencio en los partidos de cuartos de la Libertadores mientras adornaba la entrada de su sede en Asunción en homenaje a Izquierdo.