Escándalo en Bolivia, a horas del partido con Colombia la razón por la que se puede suspender

La previa del partido entre Bolivia y Colombia por las Eliminatorias Sudamericanas se ha visto empañada por una serie de amenazas que ponen en riesgo el normal desarrollo del encuentro. Dirigentes vecinales han anunciado su intención de bloquear el acceso al estadio Municipal de El Alto, generando una creciente tensión y preocupación en la ciudad.

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Según informaciones de Radio Centro, las autoridades municipales de El Alto se encuentran investigando las amenazas de Aurelio Mamani, un dirigente vecinal que ha convocado a la ciudadanía a manifestarse en contra del partido. La vocera de la alcaldía, Beatriz Zegarrundo, ha calificado a Mamani como una persona negativa para la ciudad y ha solicitado la intervención de la Fiscalía y la Policía Nacional para garantizar la seguridad durante la jornada.

"Estos señores son la vergüenza de la ciudad de El Alto y son personajes nefastos que prácticamente están instigando a delinquir", declaró Zegarrundo. La funcionaria también ha denunciado que dirigentes vecinales del Río Seco han amenazado con bloquear las avenidas que conducen al estadio con escombros y, si fuera necesario, agredir a los deportistas.

Estas amenazas han generado una gran incertidumbre sobre el desarrollo del partido y han puesto en alerta a las autoridades locales y a la Conmebol. Hasta el momento, el ente rector del fútbol sudamericano no se ha pronunciado oficialmente sobre la situación, pero la posibilidad de que el partido sea suspendido o retrasado es cada vez más latente.

La situación se agrava por las polémicas previas al partido, que incluyen denuncias por parte del cuerpo técnico de Colombia sobre modificaciones en sus peticiones y la cancelación de un partido amistoso. Estas circunstancias han generado un clima de tensión adicional y han incrementado la preocupación por la seguridad de los jugadores y el personal técnico de ambos equipos.

Las autoridades bolivianas han reforzado la seguridad en la zona del estadio y han desplegado un importante contingente policial para garantizar el orden público. Sin embargo, la amenaza de bloqueos y enfrentamientos violentos sigue siendo una posibilidad real.

La suspensión del partido tendría importantes consecuencias tanto para Bolivia como para Colombia, ya que ambos equipos se encuentran en la lucha por un cupo al Mundial de 2026. Además, generaría una gran polémica a nivel internacional y podría dañar la imagen del fútbol sudamericano.

En las próximas horas se espera conocer una posición oficial de la Conmebol y de las autoridades bolivianas sobre la situación. La afición futbolística de ambos países se encuentra a la expectativa, esperando que el partido se pueda disputar en un clima de paz y tranquilidad.