Alberto Gamero y sus pecados en la derrota con Atlético Mineiro

El panorama no pintaba de la mejor forma desde la semana pasada, cuando Andrés Llinás sufrió un esguince de tobillo y se confirmó que no podría estar para la revancha ante Atlético Mineiro en la fase 3 de la Copa Libertadores, llave que se llevaron los brasileños al derrotar por 3-1 al derrotar al conjunto de los Millonarios este miércoles.

Como si fuera poco, a pocos minutos antes de iniciar el juego definitivo, Ómar Bertel se convertiría en una nueva baja para el ‘Embajador’, que se vio obligado a improvisar con Jorge Arias jugando de lateral izquierdo, condicionando el planteamiento del estratega samario, aunque el vallenato terminó haciendo un aceptable trabajo individual.

Sin embargo, y a pesar de los contratiempos, Millonarios se supo plantar en el primer tiempo del compromiso e hizo pasar malos ratos a los ‘Galos’. Incluso tuvo las chances más claras para marcar, pero no pudo hacerlo. Es decir, demostró que el partido podía ser parejo y que en cualquier momento se podría ir en ventaja, más allá del favoritismo de los locales.

Ese escenario principal se dio en gran parte al gran trabajo realizado por la primera línea de volantes azules, los cuales supieron controlar las intenciones rivales y se mostraron muy sólidos, tanto en defensa, como en ataque. Sin embargo, el técnico decidió sacar a Juan Carlos Pereira, alegando que este estaba amonestado.

Se alteró la zona medular

Grave error. De esa forma desproporcionó el orden en la zona medular que mostraba hasta el momento su equipo y por esa zona se empezaron a colar las acciones que concluyeron en los goles locales que significaron la dolorosa derrota que deja fuera al equipo capitalino de la Libertadores y lo relega a jugar la Copa Sudamericana.