Fútbol Colombiano

Dicen ser la mejor hinchada, lo que hizo la gente de Millonarios cuando iban perdiendo

Los hinchas embajadores reaccionaron de manera adversa cuando su equipo comenzó a perder la ventaja en el marcador. 

Por Marco Gómez

Los hinchas embajadores reaccionaron de manera adversa cuando su equipo comenzó a perder la ventaja en el marcador. 
Los hinchas embajadores reaccionaron de manera adversa cuando su equipo comenzó a perder la ventaja en el marcador. 
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Millonarios y Santa Fe se enfrentaron en el tan esperado clásico bogotano del segundo semestre. Sin embargo, lo que debía ser una jornada deportiva memorable se convirtió en un episodio oscurecido por la violencia y la falta de fair play. El partido comenzó con Millonarios en ventaja, logrando un gol tempranero que los ponía al frente.

Sin embargo, la situación se tornó crítica cuando dos jugadores del equipo embajador, David Mackalister Silva y Daniel Giraldo, fueron expulsados en momentos clave del partido debido a violentas entradas, según la decisión del árbitro Carlos Ortega. La reacción de los aficionados de Millonarios fue llamativa y lamentable.

A medida que Santa Fe tomaba la delantera en el marcador, varios seguidores abandonaron el estadio El Campín antes de que concluyera el partido, incapaces de soportar la derrota frente a su rival. Lo más preocupante ocurrió al final del encuentro, cuando un grupo de aficionados ubicados en la tribuna preferencial de occidental lanzaron objetos, incluyendo botellas y monedas, hacia los jugadores de Santa Fe y otros presentes en el campo.

Incluso la manga protectora que rodea a los futbolistas no fue suficiente para evitar este acto de hostilidad. Los videos que circulan en redes sociales muestran la peligrosa situación que enfrentaron los jugadores de Santa Fe, fotógrafos y miembros del personal del estadio debido a la agresión por parte de los hinchas de Millonarios.

Los hinchas de Millonarios demostraron un mal comportamiento

Este lamentable episodio sirve como recordatorio de la importancia de mantener la deportividad y el respeto en el deporte, sin importar el resultado del partido. La violencia en los estadios no tiene cabida en el fútbol y debe ser condenada por todos los aficionados y autoridades deportivas.
 

 


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