Édier Ocampo no se dejó intimidar por las mañas de Felipe Pardo en el clásico paisa

Atlético Nacional dio un gran golpe de autoridad a su clásico rival, el Independiente Medellín, luego de ganarle por 3-1 en una nueva edición de este duelo que enfrenta a los dos grandes equipos antioqueños y que se llevó con gran categoría el elenco dirigido por el estratega brasileño Paulo Autuori.

Fue el mismo técnico quien días atrás se anticipó a dar una de las noticias que sería novedad para el cruce que se dio el sábado: la aparición del lateral juvenil Édier Ocampo, quien apareció en el onceno titular para cubrir el puesto de Andrés Román, luego de que este fuera expulsado en el partido anterior contra el Unión Magdalena.

A pesar de la presión que significa jugar un compromiso como estos, especialmente para aquellos que apenas comienzan su carrera deportiva y tienen poca experiencia actuando en duelos de este calibre, el marcador de tan solo 19 años estaba dando una gran muestra de carácter a sus rivales y a su propia gente, jugando con gran soltura y sobriedad.

Por tal motivo, los jugadores de más bagaje del ‘Poderoso’ quisieron aprovecharse de la juventud de Ocampo para ‘bajarle la caña’ a partir de estrategias mañosas y sería el atacante Felipe Pardo el que buscaría intimidar al marcador derecho para sacar ventaja a través de una posible inocencia de juvenil.

Así fue la acción entre Pardo y Ocampo

Transcurría el minuto 29 de juego y, en una acción natural de disputa por el esférico, Ocampo quiso cerrarle el paso a Pardo en su proyección ofensiva, a lo cual el jugador del DIM respondió empujándolo, acción que calentó el clima del partido y Wilmar Roldán tuvo que intervenir para imponer calma e incitó a los dos jugadores que hicieran las paces. Luego de eso, Édier mantuvo su nivel y el ‘Verde’ se llevó los tres puntos con los goles de Jefferson Duque y Tomás Ángel.